Vestidos arriesgados

Hay vestidos que, bajo mi punto de vista, nunca debieron plasmarse en un papel para ser creados y mucho menos, que alguien se atreva a ponérselos. Por mucho que sean de firma o cuesten un pastón, hay que tener claro, ante todo, lo que queda bien, porque en cuestión de gustos la cosa es más personal.

Hace un par de años se casaron cuatro amigos en un mismo verano y después de alegrarme por todos llegó el temido momento ¡hay que buscar vestidos! Para dos iba a compartir, lo tenía claro, y busqué y rebusqué en todas las tiendas de Madrid, tenía que se el mejor , al final encontré uno que me gustó y me lo llevé (fue el más caro). Sin embargo, el que compré dos días antes, super barato y que me tuvieron que arreglarr a contrarreloj, fue sin duda alguna el mejor de todos, el que más me gustó y gustó a los demás.

En fin, que en cuestión de vestidos no siempre lo caro es lo más bonito y aquí tenemos la prueba. Escotazos imposibles, cortes demasiado atrevidos y transparencias que no vienen a cuento. ¡Ojo! no quiero decir que no me gusten estos vestidos...o si, jejeje.