Ayer terminaba una de las pasarelas más importantes del mundo. Milán cerraba sus puertas a la semana de la moda masculina por este año y aún con el frío de este invierno en el cuerpo, diseñadores como Cavalli, Jil Sander, Valentino, Prada o Bottega nos presentaban las colecciones para el otoño-invierno 2.012-2.013.
Los que me conocéis sabéis que no me gustan los hombres demasiados clásicos pero mucho menos los modernos, creo que no es para nada necesario colorarse los pantalones a la altura de las axílas ni tampoco llevar prendas extrabóticas imposibles de mirar. Eso sí, un toque clásico para mí es lo mejor. Por eso, paso a hacer una crítica de las prendas que los diseñadores han dejado ver esta semana en Milán.
Primero empezaré por los que más me gustan, por mis preferidos, que en esta ocasión son cuatro clásicos de la moda.
Valentino: Como mujer diré que uno de mis favoritos. Los trajes de dos piezas en corte clásico son el centro de su colección. Opta por colores oscuros y discretos. Arriesga esta temporada con las capas para lucirlas encima de los trajes. Así que los amantes de esta prenda estáis de enhorabuena, podréis lucirla sin dejar de lado la moda. ¿Os atrevéis?
Salvatorre Ferragamo: Otro de mis grandes diseñadores. Sin duda alguna la palabra elegancia es la que mejor lo define. Ni una mala crítica. Da a los hombres ese toque de sofisticación que tanto nos encanta. Se centra en el color vino y azul para vestir al hombre de los pies a la cabeza.
Ermenegildo Zelda: Dejando un poco de lado el traje y entrando en un toque más informal, vemos como este diseñador juega con la piel para crear abrigos y pantalones para el hombre. Con un efecto acolchado y centrándose en los colores caquis, es todo un acierto para los amantes de las combinaciones en marrón.
Burberry: El clásico de los clásicos. Siempre perfecto, en grises y con gorras, sombreros, guantes, carteras y paraguas como marca su tradición. Al más puro estilo british entalla las chaquetas al cuerpo y viste sus diseños con los zapatos brogues. Siempre perfectos.
Y hasta aquí mis favoritos, intentaré no ser muy crítica con lo que queda por venir, jeje, pero hay piezas que no puedo mirarlas durante más de dos segundos.
Bottega Veneta: Centra su colección en los trajes de dos piezas. Intenta mezclar lo clásico con lo moderno dotando a los trajes de un efecto mojado que bajo mi punto de vista no es nada acertado. ¿Veis a vuestros compañeros de trabajo vestir estos trajes en la oficina?
Prada: Cómo un gigante de la moda como es Prada, con esos bolsos y esos zapatos tan estupendos que hace para las mujeres, puede atreverse a diseñar y dar vida a estas piezas. Quizá por eso mismo, porque es Prada y no cualquier desconocido. Sólo una cosa: no veo a mis amigos con esos abrigos para ninguna de las ocasiones que la vida le pueda presentar. El blanco podría aprobar, pero no lo veo como color de abrigo para los hombres.
Versace: Diseños demasiado arriesgados para los hombres. Muchos colores, demasiado vivos y formas muy arriesgadas.
Y vosotros ¿qué os parecen los diseños que se han paseado esta semana por Milán?
Los que me conocéis sabéis que no me gustan los hombres demasiados clásicos pero mucho menos los modernos, creo que no es para nada necesario colorarse los pantalones a la altura de las axílas ni tampoco llevar prendas extrabóticas imposibles de mirar. Eso sí, un toque clásico para mí es lo mejor. Por eso, paso a hacer una crítica de las prendas que los diseñadores han dejado ver esta semana en Milán.
Primero empezaré por los que más me gustan, por mis preferidos, que en esta ocasión son cuatro clásicos de la moda.
Valentino: Como mujer diré que uno de mis favoritos. Los trajes de dos piezas en corte clásico son el centro de su colección. Opta por colores oscuros y discretos. Arriesga esta temporada con las capas para lucirlas encima de los trajes. Así que los amantes de esta prenda estáis de enhorabuena, podréis lucirla sin dejar de lado la moda. ¿Os atrevéis?
Salvatorre Ferragamo: Otro de mis grandes diseñadores. Sin duda alguna la palabra elegancia es la que mejor lo define. Ni una mala crítica. Da a los hombres ese toque de sofisticación que tanto nos encanta. Se centra en el color vino y azul para vestir al hombre de los pies a la cabeza.
Ermenegildo Zelda: Dejando un poco de lado el traje y entrando en un toque más informal, vemos como este diseñador juega con la piel para crear abrigos y pantalones para el hombre. Con un efecto acolchado y centrándose en los colores caquis, es todo un acierto para los amantes de las combinaciones en marrón.
Burberry: El clásico de los clásicos. Siempre perfecto, en grises y con gorras, sombreros, guantes, carteras y paraguas como marca su tradición. Al más puro estilo british entalla las chaquetas al cuerpo y viste sus diseños con los zapatos brogues. Siempre perfectos.
Y hasta aquí mis favoritos, intentaré no ser muy crítica con lo que queda por venir, jeje, pero hay piezas que no puedo mirarlas durante más de dos segundos.
Bottega Veneta: Centra su colección en los trajes de dos piezas. Intenta mezclar lo clásico con lo moderno dotando a los trajes de un efecto mojado que bajo mi punto de vista no es nada acertado. ¿Veis a vuestros compañeros de trabajo vestir estos trajes en la oficina?
Prada: Cómo un gigante de la moda como es Prada, con esos bolsos y esos zapatos tan estupendos que hace para las mujeres, puede atreverse a diseñar y dar vida a estas piezas. Quizá por eso mismo, porque es Prada y no cualquier desconocido. Sólo una cosa: no veo a mis amigos con esos abrigos para ninguna de las ocasiones que la vida le pueda presentar. El blanco podría aprobar, pero no lo veo como color de abrigo para los hombres.
Versace: Diseños demasiado arriesgados para los hombres. Muchos colores, demasiado vivos y formas muy arriesgadas.
Y vosotros ¿qué os parecen los diseños que se han paseado esta semana por Milán?
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